Los partidos post parón de selecciones siempre han entrañado un riesgo extra. Máxime cuando eres el líder y juegas en el campo de un recién ascendido, el típico equipo que sueña con la machada y abrir el periódico dominical. Por eso, Ancelotti y sus jugadores tenían muy claro que su primera visita liguera al campo del Eibar debía ser afrontada en primer lugar con respeto, y en segundo con ganas.
A nivel deportivo la única duda que tenía el Real Madrid quedó despejada a eso de las 17.00 horas. Isco iba a hacer de Modric en Ipurúa. Ancelotti optaba por el talento del malagueño por encima del físico de Khedira. Apuesta valiente, desde luego. De una tacada, el Real Madrid juntaba a James, Isco, Bale, Cristiano Ronaldo y Benzema. Casi nada al aparato.
El partido comenzó con el Real Madrid dominando la pelota, como era de esperar. El Eibar parecía fiar sus opciones a cazar alguna buena contra o que el equipo blanco tuviera un error propio. Después de los primeros instantes de tanteo fue el conjunto merengue el que empezó a visitar el área local con mayor asiduidad. De hecho, Gareth Bale estuvo a un pelo de poner el 0-1 en un gran lanzamiento de falta que consiguió salvar Irureta con reflejos y con la ayuda del larguero. El efecto del galés tenía el demonio metido en el cuero. Faltó poco.
Eso sí, no iba a tener que esperar mucho el líder de la Liga para adelantarse en el marcador. La acción de Cristiano Ronaldo por la banda derecha no fue bien rematada por Benzema, pero el balón volvió a los dominios del portugués para, estirando la pierna junto a la línea de fondo, terminar poniendo el cuero en el segundo palo y encontrar la cabeza salvadora de James Rodríguez. El colombiano, que acompañaba la jugada, fue el más listo de la clase. El Madrid empezaba a dar normalidad al encuentro.
El Eibar intentó que el gol en contra no le desestabilizara. De hecho, tuvo un coletazo que le pudo costar el empate al Real Madrid con un remate dentro del área de Saúl que encontró la pierna salvadora de Iker Casillas. El portero merengue salvaba a su equipo y seguía aumentando sus minutos sin recibir gol en Liga lejos del Bernabéu.
El equipo local no había aprovechado su opción de igualada, algo normalmente letal si tienes delante al Real Madrid. Y sobre todo si enfrente tienes como rival a Cristiano Ronaldo. Y es que poco antes de la llegada del descanso el portugués iba a hacer buena una gran combinación entre Bale y Carvajal por la banda derecha para zapatear dentro del área y al primer palo el envío del lateral y estamparlo contra la red de Ipurúa. Al descanso, resultado de oro para los blancos.
Ficha técnica
Eibar 0: Irureta; Bóveda, Ekiza, Albentosa, Abraham; Errasti, Dani García, Capa, Saúl (Lekic 78’); Arruabarrena (Lara 78’), Del Moral (Ángel 70’)
Real Madrid 4: Casillas, Carvajal, Pepe, Ramos (Varane 72’), Marcelo, Kroos, Isco, James (Coentrao 78’), Cristiano (Arbeloa 83’), Bale y Benzema
Goles: 0-1 James (23’), 0-2 Cristiano Ronaldo (43’), 0-3 Benzema (69’), 0-4 Cristiano Ronaldo (84’)
Árbitro: Fernández Borbalán. Amonestó a Ramos, Irureta, James, Arruabarrena, Errasti, Albentosa
Estadio: Ipurúa
La segunda parte del encuentro fue muy parecida a la que jugó el conjunto blanco en Villarreal. Como ya hiciera en El Madrigal, el Real Madrid fue desgastando a su rival a base de posesiones largas y de control del juego. Sin la necesidad de pisar el acelerador, el objetivo de Ancelotti era ir minando la moral del Eibar a base de que los vascos se vieran cada vez más lejos de Casillas.
El plan le salió perfecto al italiano pues el Eibar apenas encontraba vías hacia la meta madridista, y la desesperación crecía en Ipurúa a base de posesiones largas del equipo merengue. La anestesia había parado por completo la posibilidad de reacción de los locales, y el remate final lo puso Karim Benzema marcando el 0-3 con un gran golpeo por la escuadra tras una buena pelea de Marcelo por el balón y un gran centro de James Rodríguez al área. Si Cristiano Ronaldo es el hombre de las rachas, la del galo tampoco es poco de pavo, cinco goles en los últimos cinco partidos jugados en Liga.
Con el partido finiquitado el interés radicaba en ver si Cristiano Ronaldo llegaría a los 20 goles en Liga en este partido. Cuestión respondida de forma afirmativa por el ‘7’ madridista. Un penalti muy claro de Albentosa por mano dentro del área le dio la oportunidad al delantero portugués de anotar su segundo gol en el partido, el vigésimo liguero del curso. Una pasada. Como estratosférica sigue siendo la racha triunfal blanca después del paseo en Eibar. Puntos, goles y victorias que sonríen a los de Ancelotti. Hoy en día, un equipo imparable.
Fuente: defensacentral.com